Transporte público
Cambiar el modelo El Imparcial 27 de diciembre del 2012 El siglo XXI avanza con la temeridad del tiempo sin que podamos hacer mucho al respecto, de no ser aprovechar cada oportunidad que este nos da para intentar mejorar nuestro calidad de vida, por lo tanto nuestro entorno. Pero en muchos lugares, esta entrada a un momento histórico marcado por la ciencia y el uso de las tecnologías no ha representado si no una frivolización de la mismas. Tenemos dispositivo electrónicos que nos sirven para conectarnos en tiempo real con cualquier parte del mundo, pero los utilizamos más para transmitir cotidianidades, que para captar o difundir conocimiento. Hemos desarrollado todo tipo de nuevas curas y tratamientos médicos, pero no están disponibles para la mayoría de la población. Tenemos una inmensa variedad de de tecnologías constructivas, pero seguimos aferrados a procesos costosos, poco eficientes y contaminantes. Arribamos a esta nueva era con unas inmensas expectativas de mejora,