5º Congreso de ciclismo urbano
La bici da la cara
Al final de la semana
pasada en nuestra ciudad capital, se llevó acabo el encuentro
Nacional de Ciclismo Urbano, convocado por la BiciRed nacional, el
colectivo Mundo Ceiba y auspiciado por varias organizaciones. Entre
ellas la Casa de la Ciudad y la Fundación Alfredo Harp Helú. A esta
convocatoria acudieron organizaciones civiles que promueven la
bicicleta como medio de transporte del todo el país.
En Oaxaca la lucha por
otorgarle un espacio a la bicicleta en la vida de las personas, ha
sido mantenida por varias décadas a la espera de encontrar un lugar
en la vida de las personas, y de nuestro medio ambiente. Pero ha sido
en los último años que este movimiento a tomado vuelo de la mano de
los intensos cambios sociales y económicos que se ven reflejados por
todo el mundo. Así como una lenta toma de conciencia de nuestros
gobernantes.
Por un lado, nos
enfrentamos a una severa crisis económica que hace que el gasto en
combustibles sea ya en algunos países como Estados Unidos igual al
10% del ingreso promedio de una persona. Por otro, nuestro planeta da
muestras de un sobrecalentamiento, resultado de la intensa actividad
humana, que se ha eincrementado exponencial mente, a medida que la
población mundial se acerca a los 7 mil millones de personas.
Pero también, otros
aspectos en los ámbitos locales hacen, que el uso de la bicicleta
como medio de transporte sea una solución a otras circunstancias que
las sociedades enfrentan en la actualidad. Como la otra crisis
derivada de la epidemia de diabetes que asola a nuestro país y que
rosa ya al 8% de la población, es decir, cerca de 10 millones de
personas. Este número debería de angustiarnos un poco.
Pese a todos estos datos
perfectamente comprobables, y las experiencias de otras ciudades y
países, en México el uso de la bicicleta no se ha convertido en un
tema importante para las políticas de las ciudades. Ha sido sólo el
impulso de la sociedad civil organizada, la que de hecho ha logrado
avances en la materia.
Fue mediante la presión
ejercida através de manifestaciones pacíficas, casi siempre en
forma de paseos colectivos de usuarios de la bicicleta. Que se logro
que algunos gobiernos dirigieran recursos, siempre mínimos a la
implantación de alguna infraestructura o política pro bici.
Aunque hay que repetir que
por desgracia, estos logros han sido siempre muy limitados. Sobre
todo, cuando se comparan con las enormes inversiones que se hacen en
otros rubros, como construírle segundos pisos a arterias colapsadas,
--y que normalmente siguen colapsadas pero a dos niveles--
Es por estos motivos que
no podemos dejar pasar de largo el hecho de que diversos grupos de
personas de todas partes del país se reúnan en nuestra ciudad, para
intentar dan un giro a la forma de movilidad que padecemos cada día.
Y que como sabemos todos los que aquí vivimos, representa un enorme
déficit en la calidad de vida de los habitantes de la urbe.
En los días que duró
este encuentro pudimos escuchar experiencias varias, sobre este medio
de movilidad que cumple ya más de un siglo de existencia.
Desde aquellas que tienen
que ver con el diseño de ciclovías, de quienes con la formación
técnica pertinente, compartieron con los distintos miembros de la
sociedad y algún representante municipal. Hasta historias de
colectivos de mujeres que se organizaron para aprender a reparar una
bicicleta sin la ayuda de ningún “hombre”.
Pasando por la magnífica
experiencia de la ciudad de Portland Oregon, que incrementó de un 2%
a un 20% los viajes totales realizados en la ciudad. Aprovechando la
bicicleta como medio de transporte, sobra decir lo que eso implicó
para el tráfico de la ciudad.
Por un par de días en
nuestra ciudad, fue posible respirar los aires de un cambio que
pudiera representar no sólo una forma de descongestionar nuestras
arterias. Si no, una manera de reconectarnos con nuestro espacio
vital, al tiempo que recordamos que tenemos un cuerpo que requiere
ser mantenido en un buen estado.
En materia urbana es
siempre peligroso hacer de futurólogo, las previsiones suelen errar
constante mente. Sin embargo, diagnosticar es una labor mucho más
viable, para la que estamos ya preparados. Y no es muy complicado
comprender que las ciudades en México enfrentan una crisis en
materia de movilidad, que sin darnos cuenta representa seguramente
uno de los rezagos que más afectan en el crecimiento de sus
economías.
Es por estos y otros
muchos motivos que debemos intentar dan un giro, modificar nuestro
rol de vida y trazar una línea que separe nuestro pasado, del futuro
que queremos. Como aquella línea blanca que personas activas y
conscientes trazaron con pintura en la Avenida Juárez entre
las calles de Independencia y Constitución. Donde una pequeña
leyenda en el piso, advierte el cambio que viene: Sólo Bicis...
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